15 enero 2007

Hay que tomar al toro por las astas

Hace un tiempo que vengo sintiéndome mal con la humanidad por lo injusta que es conmigo, pero nunca me puse a pensar si la que realmente es injusta conmigo soy yo. Así es, yo soy injusta conmigo, pero siempre es mas fácil hecharle la culpa a los demás. Viviendo en estás condiciones dificilmente llegue lejos, entonces decidí "Tomar el toro por las astas", si algo me molesta lo cambio, sin esperar que los demás lo cambien por mi. Creo que ese es el mejor regalo de año nuevo que pude hacerme, a este año lo recibí así, con la frente bien alta, el corazón fuerte y una decisión que hace años no veía en mi. Acá estoy encargándome de lo mio, haciendo dieta, sin que esto me desespere ni vuelva loca, inscripta en la universidad, para recibirme y ser esa profesional que siempre soñé ser, haciendo todos mis quehaceres sin renegar de ello, es más con mucho orgullo de no depender de nadie para hacerlos, tratando de organizarme y perderle esa estúpida fobia a la rutina. Creo que son muchos cambios y muy bruscos todos, pero así soy yo, puramente emocional, apasionada y estoy muy orgullosa de ser así. La verdad que así es otra cosa, antes en mi vida lo único que hacía era lamentar porque lo que había sido ya no era, entonces en vez de disfrutar las maravillas de presente lloraba las vivencias maravillosas del pasado, que no eran tales, ya que uno del pasado siempre recuerda los mejores momentos. La vida es como una rosa, tiene ese exquisito y embriagante perfume, esa belleza admirable y unas espinas muy puntiagudas, lo que hay que aprender y lamentablemente en ningún lado lo enseñan es a aprovechar esa deliciosa fragancia y esa insuperable belleza y saber esquibar o limar esas espinas sumamente puntiagudas. Me parece que estoy filosofando demasiado para mi gusto. Pero bueno esta soy yo, con mis altibajos emocionales, mis dudas, indecisiones, todo a flor de piel siempre, esa es la sal de mi vida. Soy yo, autentica, única, sin igual. JEJEJE Hasta la próxima.

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