18 octubre 2007

Un día muy triste

Hoy para mi es un día muy triste, un día como hoy pero hace 5 años perdí a una madre, no llevábamos la misma sangre, pero en el poco tiempo que pude estar al lado de ella fue mucho más que una madre para mi. Mi suegra, que nunca fue mi suegra sino la mejor madre del mundo. Es impresionante como pasa el tiempo, en aquel momento sentí que moría con ella, y que nada podía aliviar ese dolor tan grande que sentimos todos al perderla. En los momentos más dificiles suelo pensar mucho en ella, en lo que me diría, en lo que pensaría y hasta que me aconsejaría, pero es muy difícil convivir con su ausencia. Ella me marcó la vida enseñándome con sus actitudes, que las cosas se podían hacer bien y de la manera mas diplomática para no dañar a nadie. Ella era, fue y será un ejemplo a seguir para mi, ojalá Dios me diera la posibilidad de parecerme aunque sea solo un poquito a ella, para que mis hijos puedan disfrutar de una madre con todas las letras. Duele mucho no tenerla, me acuerdo que cuando ella falleció mi marido en medio de un llanto desgarrador me dijo; - yo podía ser el mejor trapecista que existiera, porque sabía que por más que las piruetas fueran osadas y peligrosas, tenía una red fuerte, que aunque no la usara, con el simple hecho de saber que estaba para sostenerme si caía podía arriesgarme a todo. Cada vez que recuerdo esa frase que es totalmente cierta se me estruja el alma, desde el momento de su partida mi esposo no fue el mismo, perdió esa seguridad que tenía y eso lo afectó mucho. Pero día a día tratamos de superarlo y de aprender a vivir sin redes, a ser un poco más cuidadosos para no caer y así poder vivir más unidos. Ella a pesar de no estar físicamente entre nosotros, a presenciado cada uno de nuestros mejores y peores acontecimientos, y seguramente desde el cielo nos mira para cuidarnos. Cualquier cosa que pueda decir de esta gran mujer es poco, porque fue y es lo más preciado que tenemos como hijos. Ella está presente cada segundo de nuestras vidas, en los más hermosos recuerdos , en las charlas diarias, en nuestro corazón, por eso tenemos el tesoro mas preciado, las vivencias que tuvimos juntos y las guardamos en el corazón apretando muy fuerte como para que nunca se puedan escapar. Es un ejemplo a seguir para cualquier mujer, luchadora, trabajadora, muy buena madre, muy buena esposa y con mucha pero mucha fuerza. Ojalá Dios me diera la posibilidad de aparecerme a ella, sería el premio más grande que pudiera existir. Hasta la Próxima!!

2 comentarios:

Julio dijo...

Hace 5 años fue un día muy triste... pero hoy no debería serlo.
Cada vez que la recordamos, es su recuerdo el que nos ayuda a superar obstáculos y el que nos enseña que prácticamente nada es imposible si uno se lo propone.
Te agradezco este recuerdo y quiero que sepas que siempre fuiste y sos el pilar que me ayuda a superar su ausencia; vos y esos hermosos angelitos que nos regaló el cielo y que, seguramente, son el orgullo de su abuela Lila.

Anónimo dijo...

y todos nosotros también así lo sentimos...
Lloré por ella lo que se llora por una madre, lo que debería haber llorado por la mía carnal, pero a la cual nunca sentí, como la sentí a ella...
Duele mucho, aunque haya sido prestada, robada, compartida..